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 CJG, ¡el mayor “gandalla” de Q. Roo!

                                         Lic. Luis A. CABAÑAS BASULTO*

         Consummatum est  (locución latina que significa “se acabó todo”, “todo está cumplido”)

         Y es que, efectivamente, con el registro de la ahora ex secretaria de Finanzas y Planeación de Quintana Roo, Yohanet Torres Muñoz, para encabezar la lista de “candidatos” (ja, ja, ja) a diputado plurinominales, finalmente por el Partido Verde “Ecologista” (nuevo ja, ja, ja), el lamentablemente aún gobernador Carlos Joaquín terminó por coronar un verdadero “trabajo” de ensueño.

         Aunque, le parezca un poco o mucho exagerado, la verdad es que podríamos llenar toda esta columna de “comillas”, ya que dicho signo de ortografía, en realidad, sirve para indicar que la palabra o palabras se citan de otro texto o deben entenderse de un modo especial.

         Lo cierto es que, el tema de Yohanet Torres como candidata a diputada -de la manera que fuera-, ya se venía manejando desde varios meses atrás, y aunque al principio pareció una broma de muy mal gusto -sobre todo por el medio informativo en que se manejó-, al final de cuentas entendimos que sería el cerezo del pastel  en el “gobierno” de Carlos Joaquín.

         En efecto, sucesora del tristemente “célebre” poblano Juan Vergara Fernández, al que el mandatario pretendía convertir en diputado federal -se vio obligado a renunciar por malos manejos y entregar la batuta el 8 de enero de 2018-, Yohanet Torres jamás en su vida ha sido política ni por asomo, pero en las circunstancias que la rodean se vio obligada a serlo.

         Pero, vaya, en el malogrado sexenio que finalmente concluye, Carlos Joaquín hizo y deshizo lo que vino en gana y de la manera que quiso -no de balde dicen que se trata de un gobernador “sordo, ciego y mudo”-, tal y como ocurrió, entre otros múltiples ejemplos, con su capricho de imponer al costo que sea a su entonces secretario de Gobierno, el panista Francisco Xavier López Mena, como rector de la Universidad de Quintana Roo.

         “Casualmente” nombrado el  18 de enero 2021 por el secretario de Gobierno, Jorge Arturo Contreras Castillo, como Subsecretario de Enlace Interinstitucional, el hijo de López Mena, Frank López Reyes, se registró como candidato del PAN a diputado por el principio de mayoría relativa por el Distrito VIII… y todo queda en familia, ¿No?

         Si se trata de necedades de Carlos Joaquín, sin embargo, también le toca un mucho a su supuesto ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Jesús Alberto Capella Ibarra, a quien sostuvo contra viento y marea, hasta “renunciar” -Carlos Joaquín dijo haberlo cesado- finalmente en noviembre de 2020, tras un mayúsculo escándalo público y a balazos en Cancún.

         Pese a que Lucio Hernández Gutiérrez fue nombrado como encargado del despacho ese mismo mes, en los hechos se sabe que Capella Ibarra sigue siendo el mero mero.    

         Ahora bien, Yohanet Torres no es ninguna iletrada. Es Licenciada en Contaduría por la Facultad de Contaduría y Administración de la UAM, de donde se certificó profesionalmente a través de la Federación de Colegios de la Contaduría Pública de México, y tiene una Maestría en Impuestos y estudios de doctorado en Ciencias de lo Fiscal por el Instituto de Especialización para Ejecutivos.

         Antes de fungir como titular de Finanzas era Recaudadora de Rentas en Solidaridad y es socia fundadora del Colegio de Profesionales de la Contaduría de la Riviera Maya, al igual que de la Asociación Nacional de Especialistas Fiscales, y socia activa de la Academia Fiscal Mexicana y del Colegio de Especialistas Fiscales. Cero política

         El meollo del caso es que convertirla en diputada, por estar primera en la lista del Verde- como seguramente ocurrirá-, muy probablemente será titular de la Comisión de Hacienda del Congreso del Estado, desde donde podrá “maniobrar” para que todas las Cuentas del Gobierno del Estado, inclusive las que se “maquillaron” para las  campañas, resulten inmaculadas.

         Para no pocos, el ex gobernador cozumeleño Félix González Canto -de no pocos tristes recuerdos para Quintana Roo- habría sido parte del equipo de “asesores” del yucateco hermano del ex gobernador Pedro Joaquín Coldwell y habría “negociado” con él su acercamiento con el Verde, tras que tanto el PAN como el  PRD se negaran a aceptar como candidata a Yohanet Torres.

         Para nadie es desconocido que, al igual que Carlos Joaquín, González Canto sufrió las de Caín para poder “justificar” el sonado multimillonario endeudamiento de Quintana Roo, para lo cual envió a Fredy Marrufo durante el último tramo de  su gobierno al Congreso del Estado, donde fue “electo” por sus pares como titular de la Comisión de Hacienda, y tan-tan. Se lavaron deuda y malos manejos.

         El “agradecimiento” de Félix no paró ahí, ya que después de “nombrar” como sucesor a Roberto  Borge, éste lo hizo candidato a Senador y, en menos que canta un gallo, negoció para que su paisano Fredy Marrufo fuera nombrado titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Territorial y Urbano.

         El “gandallismo” de Carlos Joaquín alcanzó todos los niveles, inclusive negociaciones con Morena para apoyar, primero, la candidatura de Mara Lezama para la reelección de ésta en Benito Juárez, pese a que, a diferencia del 2018, cuando la ex “periodista” obtuvo 162 mil 670 votos en alianza con el PT, con el Verde, PT, y MAS, ganó la elección con 89 mil 704 votos. Es decir, se reeligió con 72 mil 966 votos menos que los de 2018.

         Desde ese entonces estaba visto que el mandatario le apostaba a huir de la cárcel, ya que el sobreendeudamiento del Estado rebasa límites imaginables, a grado tal que, en castellano, hasta hace unos meses se hablaba de hasta 70 mil millones de pesos, cuando que el equipo joaquinista y el propio Carlos Joaquín se refieren a poco más de los 23 mil millones que le heredó Borge.

         Las negociaciones del gobernante también llegaron hasta lo más alto de Morena, a la cúpula, primero con el mismito presidente Andrés López Obrador, a quien le vendió el compromiso de hacer gobernadora a Mara Lezama, para lo cual se instruyó al dirigente nacional Mario Delgado Carrillo “ajustar” cifras y votos para relegar a los demás aspirantes a candidatos de Morena.

         Al parecer satisfecho con el “acuerdo”, el mandatario federal, mal instruido por sus asesores, declaró públicamente -olvidó que las declaraciones no son lo suyo- que podía convertir en colaborador suyo a Carlos Joaquín al concluir el sexenio de éste. Es de esperarse: Ojalá lo enviara como cónsul en el fin al mundo, al igual que a otros malos gobernantes.

         Ya desde un principio se sabía que la senadora Marybel Villegas Canché no era precisamente a quien el mandatario quería o prefería como abanderada de Morena a la gubernatura, sabedor de que quien resultara nominada tendría muchas posibilidades de triunfo para la gubernatura, y no porque tuviera “ángel” o por su capacidad, sino por el volumen de votos de ese municipio y por muchas millones de razones con formas de billetes.

         De haber resultado nominado candidato el también senador José Luis Pech, créannos que tampoco hubiera sido una perita en dulce para las maniobras de Carlos Joaquín, como tampoco el empresario-actor Roberto Palazuelos Badeaux, y de ahí las insistentes campañas contra ambos, el segundo de ellos más que justificado por su ego-gandallismo.

         Finalmente, aunque de años atrás, habría que ponderar la negociación permanente del mandatario con los propietarios y periodistas de los diversos medios de comunicación, con los que se firmaron jugosos contratos que, casi podemos asegurar, no figurarán en las listas de “las putas de Carlos Joaquín”, tal y como ocurrió con el caso de Roberto Borge. Ni habrá listas.

         Ahora bien, si del cuestionado equipo del mandatario se trata, no podemos menos que referirnos a otro cuate suyo que, vía PRD, desde un principio fue objeto de denuncias por redes sociales -ya sabe Usted, la prensa no puede hablar-, nos referimos al “brillante” director de la Comisión de Agua Potable, Gerardo Mora Vallejo, hermano de la actual futbolista convertida en diputada, Iris Adriana.

         También candidato a diputado plurinominal, y también en primer lugar, ahora por el PRD, Mora Vallejo, fallido candidato a gobernador en 2010, es fuerte “competidor” en ese renglón de otra pésima “colaboradora” de Carlos Joaquín, sostenida pese a permanecer 6 años en el ojo del huracán: Nos referimos a la prepotente Rosa Elena Lozano Vázquez, aunque, por falta de espacio, en breve habremos de referirnos a ella.

          

            (Permitida la copia, publicación o reproducción total o parcial de la columna con crédito para el autor)

 

*Luis Ángel Cabañas Basulto es un periodista con más de 45 años de experiencia como reportero, jefe de información, editor y jefe de redacción de varios medios de comunicación, además de haber fungido como jefe de información de dos ex gobernadores y tres ex presidentes municipales, y escribir cinco libros, uno de ellos pendiente de publicar.

Titulado Licenciado en Derecho en la Universidad Autónoma de Yucatán, cuenta con ocho Diplomados, tres de ellos en materia de Juicio de Amparo (2017, 2019 y 2021), Derechos Humanos y Sistema Acusatorio; La Familia y los Derechos Humanos; y Acceso a la Justicia en Materia de Derechos Humanos, así como 4 Congresos Internacionales y más de 50 Seminarios, Talleres y Cursos diversos. 

 

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Comentarios

  1. Estimado Luis Ángel Cabañas Basulto, me genera alegría que estés de nuevo con la pluma en ristre...Un abrazote de Panóptico, colega

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