¿“Romance”
de Carlos Joaquín con el narco?
Lic. Luis A. CABAÑAS BASULTO*
Publicada
esta semana y reproducida de Cambio 22, el colega Jorge Castro Noriega dice que
intentaron ejecutar al ex jefe de la oficina de operaciones de la dirección
general de Aeronáutica Civil en esta ciudad, Antonio Arreola Aguirre, presunto
operador del “Cártel de Caborca”, quien “se encargaba de proporcionar los
permisos de vuelo y la venta de turbosina a las aeronaves que por lo general
aterrizaban semanalmente en el aeropuerto de esta capital”.
El
efecto es avituallarse y cargar combustible para proseguir su vuelo al Sur del
continente o reabastecerse posterior al descargo de su valiosa, pero prohibida
mercancía. El intento de ejecución desató una balacera que se prolongó por casi
medio kilómetro, se inició en la plaza Las Américas y terminó en el cruce de la
calle Manuel Acuña con Flor de Mayo de la colonia Jardines, con disparos contra
un taxi que abordó.
El
nombre del Cártel de Caborca, surgido en Quintana Roo en los últimos años, ha sido
multicitado en los últimos meses como responsable de una serie de asesinatos,
secuestros, aunque nadie o pocos saben qué es: Una especie de “emoticon” que se
utiliza para transmitir ironía, sarcasmo, broma o simplemente darle un toque
tonto y diferente a una conversación.
Oficialmente “Heroica Caborca”, es una ciudad mexicana situada
en el noroeste en la zona del desierto de Sonora, con una ciudad que contaba
con una población de 67,604 habitantes.
Ahora
bien, el Cártel de Caborca es
una organización criminal que comandó el criminal Rafael Caro Quintero (fundador del
extinto Cartel de Guadalajara) hasta su detención.
Concentra sus operaciones de trasiego de droga en el municipio de Caborca.
El grupo tiene una disputa con la célula de Los Salazar, brazo armado del Cártel de Sinaloa. Se alió al Cártel de Juárez para disputar Sonora y
Chihuahua, decidiendo disputar el territorio de su antiguo socio, Joaquín “Chapo” Guzmán.
El
caso es que ahora se disputan la plaza de Quintana Roo, más notoria la
“pacífica” Zona Sur, donde, todo hace suponer que nuestros gobernantes poco o nada
han hecho para evitarlo, inclusive aliándose con sus cabecillas, más claro en
el caso el sexenio anterior, cuando la hoy gobernadora Mara Lezama era
presidenta municipal de Cancún y el mandatario estatal era el actual embajador
de Canadá, Carlos Joaquín González.
El
“romance” del entonces Jefe del Ejecutivo con los cárteles de la droga, entre
otros, se vio reflejado con ocasión de su cumpleaños de hace 4 años, en 2019,
cuando, según la página “Reportero Mx”,
la escultural Karolina Galvis, quien en “Instagran” se anunciaba como Joselyn
Cano, cotizada chica de “pago por evento”, estuvo presente en la fiesta privada
de Carlos Joaquín.
Lo
curioso es que a Karolina Galvis se le conocía por ser la novia preferida de
personas ligadas al narcotráfico, por lo que se le había visto en Playa del Carmen
y Alfredo B. Bonfil con altos jefes de la “Barredora” brazo armado dirigido por Rodrigo
Páez Quintero, sobrino del narco de narcos, y Jesús Darío Murrieta Navarro,
alias Cara de Cochi, que, a su vez, tiene vínculos con Los Páez.
Conocida
en los “altos niveles” como Joselyn Cano, la modelo vivía o vive en Cancún y,
entre otras cosas, cuenta con su propia línea de trajes de baño y ella no sale o
no salía por menos de 5 mil dólares la noche. La pregunta del millón es ¿Qué
hacía en la fiesta privada del entonces gobernador Carlos Joaquín ¿Quién la habría
llevado y con qué objetivo? ¿Regalo de cumpleaños? ¿“Arreglos” con el narco?
Hasta
ahí las cosas, el 10 de junio 2021 agentes de la policía Quintana Roo detuvieron
a un ex militar ligado al cartel de los Caro Quintero, quien tenía armas de uso
exclusivo de las fuerzas armadas, equipos de radio con la frecuencia de la policía
estatal y municiones de diferentes calibres.
Una
fuerte movilización policiaca generó expectativa entre los habitantes de la
capital, luego de que se reportó la detención del ex militar con, al menos, un
arma calibre .380, una escopeta y municiones calibre 12, proyectiles calibre
0.223, 5 radios móviles y uno con base en el vehículo que manejaba.
Según
el ex militar, sirvió 7 años a la Secretaría de la Defensa Nacional y luego
desertó. Su identidad, los detalles de su detención y el vehículo en el que
circulaba no los revelaron las autoridades, aunque dijo pertenecer al Cartel de
Caborca, así como a Arreola Aguirre, quien fue detenido la semana anterior y
puesto en libertad horas más tarde. Las autoridades no se pronunciaron sobre el
tema ni informaron del mismo. El hombre fue trasladado a la Fiscalía General de
la República escoltado con un fuerte operativo de seguridad del Ejército
Mexicano y los uniformados.
También
se desconoce la nula participación de la Fiscalía General del Estado, aunque se
desconfía completamente de los policías de investigación y del Ministerio
público por su aparente nexo con los criminales. Las fuerzas armadas ingresaron
a la fiscalía para resguardar las instalaciones, mientras que los policías
permanecieron en alerta máxima a los alrededores.
Sobre
el particular, “Grupo Cantón” publicó que, por razones no muy claras, en esas
fechas Didier Vázquez Méndez dejó la Fiscalía General del Estado a menos de 8
meses de tomar la Dirección de la Policía Ministerial en la Zona Sur y Centro
de Quintana Roo.
Su
renuncia, al parecer, derivó de las malas acciones durante la suspensión de una
orden de aprehensión derivado del delito de violación, de Arreola Aguirre, la
cual se dio entre sospechosas acciones y golpeteos entre corporaciones de
seguridad. Fue liberado menos de 24 horas después, con documentos del
desistimiento de su víctima debido a un acuerdo económico.
Respecto
al atentado de esta semana, el exfuncionario de aeronáutica civil se encontraba
de compras en el mencionado centro comercial, pero notó que era “venadeado”,
por lo que decidió no ir hacia su vehículo, sino abordar un taxi, pero el
movimiento fue observado por los hombres que prácticamente lo cazaban y quienes
atacaron al vehículo de alquiler.
Arreola
Aguirre estaba en compañía de su hijo, de aproximadamente 15 años de edad, el
cual resultó lesionado de un rozón en la oreja, pero se retiraron antes de la
llegada de las autoridades y acudieron a la clínica del ISSSTE, ubicado a 200
metros del sitio donde finalizó la balacera.
Aproximadamente
a las 17:30 horas, las autoridades iniciaron el “código rojo” tras registrarse
una balacera en la plaza Las Américas. Los pistoleros se desplazaban hacia el
CONALEP realizando aún, detonaciones de arma de fuego contra un taxi.
Indicaron
que encontraron la unidad y varios casquillos percutidos en la Manuel Acuña
casi con Flor de Mayo, hasta donde arribaron paramédicos de la Urem y policías
estatales, así como, ministeriales acompañados por personal de la Marina. En el
lugar atendieron al taxista, que resultó herido de dos rozones de bala, uno en
el antebrazo derecho y otro en la frente. El conductor relató que momentos
antes inició el terror.
El
hombre dijo que estaba saliendo de la plaza por el lado de Liverpool, en la
calle denominada Tzisauché, pero comenzó a escuchar golpes en la carrocería, lo
que posteriormente supo que eran balazos, sin haber identificado el sonido al
momento.
El
pasajero gritó “acelera me vienen disparando”. Presa del terror el conductor
aceleró su vehículo hacia la Insurgentes, donde al hacer su alto, los sicarios
lo alcanzaron y comenzaron de nuevo a detonar sus armas, logrando nuevamente
evadirlos, pero tomó la Flor de Mayo y logró llegar hasta la Manuel Acuña donde
dobló a la derecha tratando de reincorporarse a la Insurgentes, pero sólo logró
avanzar unos metros y le cerraron el paso con el vehículo de los pistoleros, que
alcanzó a ver era de color gris.
El
taxista señaló que durante el trayecto el menor gritó que lo habían logrado
herir y al voltear él notó que sangraba una de sus orejas, sin mayor detalle,
siendo que al cerrarles el paso logró tirarse al piso y después a la carretera
donde cayó en un charco, donde se mantuvo hasta que consideró pasó el peligro. No
logró ver qué sucedió con el menor y tampoco con el hombre al que venían
disparando.
La
Fiscalía inició con el levantamiento de los indicios y la apertura de las
investigaciones para dar con los responsables. El taxi sufrió daños materiales
y los cristales fueron rotos. Hasta hoy ninguna autoridad se pronuncia o da
información al respecto.
Lo
cierto es que la inseguridad en Quintana Roo es cada día peor -al igual que la
desinformación- y no tenemos a quién recurrir, menos aún a la propia Mara
Lezama, quien anda más ocupada socializando con el presidente López Obrador, y
tampoco podemos esperar nada de Carlos Joaquín, aunque lo curioso es que este
último “suena” como candidato -aunque Usted no lo crea- a convertirse en
Senador, aunque candidateado por el Verde “Ecologista”, amigo de la primera.
(Permitida
la copia, publicación o reproducción total o parcial de la columna con crédito
para el autor)
*Luis
Ángel Cabañas Basulto es un periodista con más de 47 años de experiencia como
reportero, jefe de información, editor y jefe de redacción de varios medios de
comunicación, además de haber fungido como jefe de información de dos ex gobernadores
y tres ex presidentes municipales, y escribir cinco libros, uno de ellos
pendiente de publicar.
Titulado como Licenciado en Derecho en la Universidad Autónoma de Yucatán, cuenta con siete Diplomados, tres de ellos en materia de Juicio de Amparo (2017, 2019 y 2021), Derechos Humanos y Sistema Acusatorio; La Familia y los Derechos Humanos; y Acceso a la Justicia en Materia de Derechos Humanos, así como con más de 75 Seminarios, Talleres, Cursos y Conferencias.
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