Aspirante, ¡con “mafia agraria” política!
Lic. Luis A. CABAÑAS BASULTO*
Aunque
dice representar a la “4T”, la diputada federal Marybel Villegas Canché,
aspirante a la candidatura de Morena por la gubernatura de Quintana Roo,
acusada de despojo en Cosgaya, Yucatán, es realmente representante y defensora
del grupo político de los ex gobernadores de la entidad y de Yucatán, Félix
González e Ivonne Ortega, respectivamente, así como de una “mafia agraria”. Vea
Ud. qué dijo Panóptico TV Chetumal sobre ese Estado:
https://www.youtube.com/watch?v=Nk85Z_ruI_Q&ab_channel=PAN%C3%96PTICOTVCHETUMAL
Por
otro lado, reportaje del portal Quinta Fuerza explica en junio de 2020 cómo aquélla
organización ha especulado por décadas con terrenos, generando ecocidios,
despojos y expulsiones de comunidades en esos Estados, incluyendo Punta Piedra,
Tulum, con ilícitos amparados y ejecutados por el gobierno de Roberto Borge,
generando reportajes nacionales y censuras de gobiernos europeos.
Muestra
de ello fue la suplente de Marybel Villegas en el Senado, Gabriela López Gómez,
consultora de imagen de la campaña de Mauricio Góngora Escalante a la
gubernatura -su idea era entrevistas en lugar de marchar-, antes de Ivonne
Ortega y del ex gobernador priista de Yucatán, Rolando Zapata Bello. Su marido era
socio de la empresa “Desarrollos Punta Piedra”, creada con el fin de
comercializar esta franja costera, una vez consumados los despojos de hoteles
asentados.
El
gobierno de Roberto Borge simuló juicios laborales para asegurar y despojar
estos hoteles con uso de la fuerza pública y expulsión de turistas, en
beneficio de la familia neoleonés Garza-Ponce y de Arturo Millet Reyes, esposo
de la ex suplente de Marybel Villegas.
Punta
Piedra, valiosísima franja costera en Tulum, muchos años fue objeto de una
disputa por la creación del ejido Pino Suárez, expropiando al propietario
original, que recibió terrenos en permuta. A pesar de los nuevos terrenos, el
propietario argumentó que el ejido no llegaba hasta la costa, y que continuaba
siendo del régimen privado, vendiéndola a la familia Garza-Ponce.
Los
ejidatarios efectuaron compraventas en Punta Piedra, donde se establecieron varios
hoteles de corte “boutique” mientras había juicios, amparos y litigios, con
frecuente complicidad de autoridades que daban o quitaban legitimidad a
documentos.
En
este momento, los regios aprovechan la gubernatura de Ivonne Ortega en Yucatán
para asociarse con la “mafia agraria” peninsular, experta en especulación y
despojo de tierras, conocida por adueñarse de zonas como Holbox o Isla Blanca,
con la suplente de Marybel Villegas como contacto.
A
su paso, en 2007, Gabriela López trajo a un grupo de operadores políticos de
Nuevo León, “Grupo de Monterrey”, al que rápidamente se alineó y, a través de
su empresa de consultoría política, “Local Políticas Estratégicas”, trabajó no
sólo con la ex gobernadora, sino con el sucesor de ésta, Rolando Zapata, al
igual que con el entonces alcalde de Solidaridad después preso, Mauricio
Góngora.
El
acta constitutiva de su empresa, realizada en Cancún y domiciliada en Playa del
Carmen, la mostraba como socia mayoritaria, con 70%, y a su marido, Arturo
Millet Reyes, con el 30% restante.
Arturo
Millet, con más de 200 terrenos registrados en Yucatán y más de 20 en Quintana
Roo, se considera una de las figuras más activas de esa “mafia”, que incluye al
ex gobernador Patricio Patrón Laviada y su hermano Alejandro; el ex director de
Banamex, Roberto Hernández Ramírez -dueño de amplias extensiones de tierra en
Tulum y Si’an Ka’an- y Alfonso “El Mosco” Pereira (artífice de la adquisición
de Bepensa de parte de Holbox)
Todos
gozaron de amplio respaldo de los gobiernos priistas de Yucatán y Quintana Roo
para operar impunemente la compra-venta de tierras, pacífica o violentas, y este
grupo, especialmente el de Félix González, hizo que Marybel Villegas pusiera
como suplente a Gabriela López como pago de favores.
En
el caso del grupo de Monterrey, las conexiones políticas de la “Mafia agraria”
hicieron que, a través de Gabriela López, pudieran ofrecerles una “tajada” de
las esperadas millonarias ganancias por el desarrollo de Punta Piedra, a cambio
de sus contactos para impunes despojos.
Así,
se constituyó, en Nuevo León la empresa “Desarrollos Punta Piedra”, donde la
familia propietaria, los Garza-Ponce, figuraba como mayoritaria, pero se le
otorgó atractivo porcentaje de 11.09% a Arturo Millet.
Asimismo,
recibió un 11.1% otro operador, Hugo César Flores Tobá, cuñado y presunto
prestanombres de Felipe Enríquez Hernández, “compadre incómodo” de Peña Nieto,
involucrado en un reportaje de Reporte Índigo con los despojos en Punta Piedra,
mientras durante el sexenio de Ivonne Ortega fue delegado del PRI y entró de
lleno a la especulación inmobiliaria, con 600 has. de terrenos ejidales adquiridos
en Ucú con prestanombres.
Una
vez creada la alianza, comenzaron los litigios y maniobras legales para
intentar arrebatar la posesión de esas tierras, lo que sería posible con la
llegada de Roberto Borge a la gubernatura. En extenso reportaje, “Los Piratas
de Borge”, de la revista Expansión, se enfoca el violento despojo de terrenos
en Punta Piedra y en el lujoso edificio Maioris Tower, en Puerto Cancún, a
través de laudos fraudulentos.
El
modus operandi era crear una empresa de papel, cuyo patrimonio fuera el terreno
deseado, gente contratada interponía una demanda laboral -sólo prestaba su INE
y desaparecía-, mientras las Juntas de Conciliación borgistas hacían el proceso
sin notificar al poseedor del terreno, hasta sacar un laudo ordenando asegurar
y entregar el terreno al “trabajador”, artífice de la maniobra.
Así,
en varios operativos, arrebataron cerca de ocho hoteles en Punta Piedra con
decenas de policías irrumpiendo para expulsar al personal y los turistas,
sacados a la fuerza sin saber a dónde ir. Aunque efectiva, la maniobra fue
excesiva y generó la atención de la prensa y quejas de embajadas de países
europeos, cuyos ciudadanos eran desposeídos. La corrupción borgista era
inocultable y su régimen tenía sus días contados.
Mientras
tanto, Marybel Villegas, tras pasar por múltiples partidos, fue colocada por
Roberto Borge como diputada priista, pues mientras era panista y luego
perredista, siempre mantuvo estrecho nexo con él como “oreja”: Le informaba de
primera mano las maniobras electorales de la alianza PAN-PRD, incluyendo un
error en el plazo de una firma que provocó que el Tribunal Electoral, borgista,
revocara la coalición.
En
pago a sus servicios, fue incluida en la lista de candidatos del PRI para
llegar al Congreso del Estado, donde, fiel seguidora de la “línea” de Borge,
autorizó el endeudamiento histórico de Quintana Roo, que pasó a segundo Estado
con más deuda per cápita, avaló la privatización de Aguakán en Playa del Carmen
y votó a favor de la Reforma Energética, pese a fuerte campaña en su contra por
parte de López Obrador.
https://luisangelqroo.blogspot.com/2025/02/muy-dificil-prueba-para-aspirante.html
Su
voto a favor de la entrega de los recursos energéticos a la iniciativa privada,
hizo que militantes del entonces naciente Morena pusieran su rostro en el “Muro
de la vergüenza”, para que su traición pasara a la historia.
Tras
la diputación, fue nombrada delegada de Sedesol, en lugar del secretario
particular de Borge, Fabián Vallado, a quien querían nombrar candidato, por lo
que debía separarse al menos un año del manejo de programas sociales federales.
Como
supuesta morenista, incluso como representante de su ala “dura” y crítica, Marybel
obtuvo la candidatura al Senado y colocó de suplente a la asesora de Mauricio
Góngora, Gabriela López, esposa del líder de la “Mafia agraria” priista.
Todo
lo anterior delata su verdadera lealtad, todavía con el grupo político de Félix
González e Ivonne Ortega, quienes la impulsaron a continuar sus críticas al
gobierno de Carlos Joaquín. El mismo grupo político que desfalcó las arcas
públicas con Roberto Borge cometió diversos atropellos y despojos es el mismo
que se escuda en Marybel Villegas para infiltrarse en Morena.
Desde
su arribo al Congreso de la Unión, Marybel Villegas ha estado en campaña
permanente, en busca de algún cargo de elección popular, “por lo menos” la
gubernatura, aunque se separara de su escaño y quedara en poder de la “Mafia agraria”.
¿Y
ahora quiere la gubernatura de Quintana Roo, de la mano del diputado zacatecano
Ricardo Monreal?
(Permitida
la copia, publicación o reproducción total o parcial de la columna con crédito
para el autor)
*Luis
Ángel Cabañas Basulto es un periodista con más de 48 años de experiencia como
reportero, jefe de información, editor y jefe de redacción de varios medios de
comunicación, además de haber fungido como jefe de información de dos ex gobernadores
y tres ex presidentes municipales, y escribir cinco libros, uno de ellos
pendiente de publicar.
Comentarios
Publicar un comentario