¡Aparatosa caída de ídolo… de barro! Lic. Luis A. CABAÑAS BASULTO* Calificado como uno de los presidentes más populares de América Latina junto con López Obrador, el mandatario de El Salvador, Nayib Bukele, a quien se le reconocía por su intensa lucha contra la delincuencia en su país, donde tiene tras las rejas a unos 25 mil delincuentes y cuestiona falta de unidad de países del continente, cayó en desgracia al ponerse de manifiesto millonario desvío de manejos y sonado homicidio. Objeto de una serie de comparaciones de su gobierno país con la política de seguridad de México, no pocos opinaban que AMLO debió adoptar una guerra similar a la de su homólogo de El Salvador contra la delincuencia, sin importar los derechos humanos, aunque los internos de ese país son víctimas de hacinamiento y están en condiciones deplorables a consecuencia del estado de excepción contra pandillas decreta