Ir al contenido principal
Sobrepeso, obesidad ¡y corrupción!


                                     Por Luis A. CABAÑAS BASULTO*
Definidos por la Organización Mundial de la Salud como acumulación anormal o excesiva de grasa perjudicial para la salud, el sobrepeso y la obesidad constituyen un problema prioritario y preocupante de trastorno de la conducta alimentaria, traducido en grave problema de salud pública que afecta a gran parte de los mexicanos, menores de edad principalmente.
En este sentido, se reforma de manera integral la Ley de Salud y los trastornos de la conducta alimentaria, ya que se trata de un problema mundial que afecta progresivamente a muchos países de bajos y medianos ingresos, sobre todo en el medio urbano, donde ha aumentado a un ritmo alarmante.
La reciente reforma, en manos del Senado, busca orientar respecto a la importancia de una alimentación correcta y su relación con los beneficios a la salud, así como diseñar y ejecutar políticas públicas que propicien la correcta alimentación que contrarreste eficientemente el sobrepeso, la obesidad y otros trastornos de la conducta alimentaria.
En teoría, la Secretaría de Salud impulsaría la prevención y control de esos temas en coordinación con las entidades, entre otros con la prohibición de publicar alimentos y bebidas con bajo valor nutricional y alta densidad energética en los centros escolares.
Entre las enfermedades que propician la obesidad y el sobrepeso se incluyen padecimientos alarmantes, como la diabetes mellitus, la hipertensión, enfermedades cardiovasculares y algunos cánceres, los cuales propiciaron un gasto social de más de 80 mil millones de pesos en 2012, y se espera que en 2017 ascienda a 150 mil millones.
Según la OMS el sobrepeso y la obesidad originan el 44% de la carga de diabetes, el 23% de la cardiopatía sistémica y entre el 7 y 41% de algunos cánceres.
Si bien el gobierno federal ha implementado estrategias para contrarrestar este grave problema, como el programa para la prevención y control del sobrepeso, obesidad y diabetes, ésta no ha sido suficiente, sino apenas una parte de las acciones que se requieren para combatirlo.
Con el objeto de mantener un control sobre los niños en este tema, se plantea el seguimiento de los menores estudiantes en coordinación con la Secretaría de Educación Pública, a través de su evaluación de peso, talla e índice de masa corporal para llevar el expediente nutrimental de cada uno.
Respecto al etiquetado de alimentos, deberán llevarlo invariablemente éstos y las bebidas no alcohólicas, que deberán incluir datos de valor nutricional y evitar que contengan alto contenido calórico y energético, con alto contenido en grasas, azúcares y sodio.
Lamentablemente, sobre este tema se adoptaron ya algunas medidas en la Cámara, una de ellas duro golpe a la economía de las familias con la mal llamada reforma hacendaria porque, lejos de buscar la eficacia de la norma y financiar el sistema de salud, se le dio prioridad y seguirá dando al comercio de la comida “chatarra”.
Un ejemplo de lo que representó la reforma fiscal fue el incremento del 8 y 14% el impuesto en alimentos procesados, supuestamente por contener un alto valor calórico de acuerdo a razonamientos medianos que se expusieron en el debate sobre el tema.
Como consecuencia, se disparó un 8 y 14% el precio del jamón de pavo y de cerdo; tocino, chorizo, salchichas, leche, queso y todos los lácteos; los procesados enlatados, como el atún, chiles curados, sardinas y hasta el chocolate que los niños consumen con la leche.
Asimismo, más de 100 productos de la canasta básica se encarecieron desde enero de 2014, con el demagógico argumento de cuidar la salud del pueblo, lo que es más falso que las promesas de un candidato.
¿Qué come un estudiante? Un pastelillo y un refresco, cuando bien le va. ¿Qué come un albañil antes de cobrar cuando llega el viernes y cobra hasta el sábado? Comida chatarra, desgraciadamente, porque vive mal pagado y, por lo tanto, mal alimentado ¿Qué come un burócrata antes de llegar la quincena?
Es decir, la gente seguirá consumiendo este tipo de alimentos, y con medidas generales, verdaderamente limitadas, que dicen un poquito más de lo mismo de lo que se viene diciendo en los últimos 20 años, no se combatirán la obesidad, sobrepeso y enfermedades ligadas a trastornos alimentarios.
Es una gran mentira y no se debe permitir que este tipo de demagogia se venda a la ciudadanía como medida a favor de la salud, a favor de las familias y para vetar a nuestros niños de una mala alimentación.
Por lo que realmente se tiene que luchar es porque se incremente el presupuesto del sistema de salud, ya que la falta de recursos ha llevado a la “chatarrización” del IMSS el ISSSTE. Basta con darse una vuelta al Instituto de Neurología, donde demoran hasta año y medio en dar una consulta.
Claro, nuestros legisladores y demás altos funcionarios de gobierno cuentan con el financiamiento para gastos médicos mayores ¡Qué padre es ser diputado! Pero el pobre pueblo debe esperar hasta año y medio para tener acceso a una consulta de especialidad en el sistema de salud.
Por su parte, el Seguro Popular se ha convertido en una gran farsa porque sobrecarga al IMSS, ISSSTE y sector salud federal, llevando a la población, acercando a la población a este servicio, pero sin que el Congreso de la Unión financie el sistema de salud.
Y es que los trabajadores del IMSS, por ejemplo, son los mejores testigos de cómo se ha ido desmantelando la seguridad social del país. No hay gasas, jeringas, mucho menos medicamentos, porque los grupos mayoritarios de legisladores irresponsables han votado por otros privilegios y negocios, pero menos por apoyar la salud.
Precisamente por eso los partidos alcanzan para viajar en helicóptero a donde quieran llegar, por eso el ex titular de Conagua, David Korenfeld, se iba de vacaciones con el helicóptero oficial de una instancia federal y un presupuesto que autorizan los legisladores, pero que hace mucha más falta para sostener más camas en el sistema nacional de salud.
Otro pequeño ejemplo es que, con una inversión de 15 mil millones de pesos, durante el gobierno de Peña Nieto se construyeron dos hospitales generales en el Estado de México, mientras que, durante el mismo periodo, el siempre criticado Andrés Manuel López Obrador hizo dos nosocomios en el Distrito Federal, con un costo de 750 millones de pesos cada uno.
La corrupción que encabezan y encubren los priístas es descomunal. y los que pagan los platos rotos son el pueblo y la gente enferma que toca las puertas del Seguro Social, ISSSTE y sistema de salud, y lo único que encontrará será una plática, una orientación y un diseño institucional para combatir la obesidad y el sobrepeso.

(Permitida la copia, publicación o reproducción total o parcial de la columna con la cita del nombre de su autor)

*Luis Angel Cabañas Basulto, periodista yucateco residente de Chetumal, Quintana Roo, con más de 38 años de trayectoria como reportero, jefe de información, editor y jefe de redacción de diversos medios de información, también ha fungido como Jefe de Información de dos gobernadores y tres presidentes municipales, y publicado tres libros.


luancaba@hotmail.com                                                      leg_na2003@yahoo.com.mx                      http://facebook.com/luisangel.cabanas            luisangel.cabanas@facebook.com                                
@legna2003                                                                 http://luisangelqroo.blogspot.mx

Comentarios

Entradas populares de este blog

¡Erizan la piel mensaje y falta de seguridad!                                                                                  Lic. Luis A. CABAÑAS BASULTO* Independientemente de que, en julio de 2022, supuestamente, difundido en Marquelia, Guerrero; el 27 de enero de 2023, en Xalapa, Veracruz, y el 14 de abril de 2023, en Apan, Hidalgo, el Cartel de Sinaloa hizo circular ayer en esta ciudad, por redes sociales, una amenazante, singular advertencia que hizo que a no pocos chetumaleños se les erizara la piel y temieran por su seguridad. Profusamente difundido, el mensaje que, a diferencia de los demás, el primero se atribuiría, al CJNG, lanzaba una seria advertencia “a toda la población y a sus alrededores” para no andar en la calle a partir de las 11 de la noche, dado que habrían llegado “a poner orden en este pueblo de gente inocente” y que no estaban jugando: “Vamos a torturar matar y descuartizar a los… ratas que ya tenemos ubicados”. Aunque, para algunos, “el mensaje es idént
Alberto Capella ¿tras “Cártel” de Sinaloa?                                                                                  Lic. Luis A. CABAÑAS BASULTO*          Sorpresivamente convertido en jefe de seguridad de la candidata del PAN a la Presidencia de la República, el oscuro secretario de Seguridad Pública del no menos opaco ex gobernador panista de Quintana Roo, Carlos Joaquín González -o sea Alberto Capella Ibarra-, sería el responsable de los supuestos comunicados sobre la presencia del Cártel de Sinaloa para atemorizar a los habitantes de Chetumal, Solidaridad y Cozumel.          Sí, leyó Usted bien. El amenazador anuncio del Cártel de Sinaloa no sólo se dio en redes sociales en esta capital, como publicamos extensamente https://luisangelqroo.blogspot.com/2024/04/erizan-la-piel-mensaje-y-falta-de.html sino que, poco difundida, también surgió una versión en días pasados en Cozumel donde, cuya, supuesta presencia, se dio a conocer en un video. De Solidaridad, se esperaría alg
  ¡Inseguridad, corrupción y pésimas alcaldesas!                                                                                     Lic. Luis A. CABAÑAS BASULTO*          No cabe duda que, lamentablemente, nos estamos “acostumbrando” a los graves males que azotan a nuestra sociedad, aunque, en algunos casos, se deba a falta de información, o bien, en el peor de los casos, por resignación, lo que se podrá constatar en las próximas elecciones, cuando, entre otros, la inseguridad y la corrupción dejen de valorarse, al menos, frente a dos alcaldesas de Morena que buscan la reelección en Quintana Roo.          En efecto, se trata de Yensunni Martínez Hernández y Ana Patricia Peralta de la Peña que, además de incompetentes, son dos pésimas administradoras, así como marrulleras, en Othón P. Blanco y Benito Juárez, respectivamente, aunque, para su buena fortuna, ambas gozan, por lo menos, del “calor” de la gobernadora verde-morenista Mara Lezama.          En cuanto a la ignorancia de la